jueves, 25 de octubre de 2012

MENTIRAS PIADOSAS


Sin mentiras la humanidad moriría de desesperación y aburrimiento…Anatole France

Durante su vida ha dado batalla en todos los terrenos. Reconocido en todo el mundo como incansable, lleno de vigor y talento. Se ha dado el tiempo para cobijado en su imagen  crear organizaciones de beneficencia que apoyan distintas causas, logrando con ello tender la mano a los más necesitados.
Sus logros han sido cuestionados por sus rivales, a los cuales dejó sembrados en la pista, eran tan amplias las ventajas que no dejaba lugar a dudas de su poderío. Los jueces y calificadores, aunque mostraban cierto escepticismo culminaron en todos los casos por otorgarle el triunfo sin vacilaciones.
Las voces de protestas no se hicieron esperar. En su país y en el extranjero los señalamientos fueron creciendo de manera vertiginosa.  Siempre se mantuvo ecuánime, defendiendo sus causas y alegando que la victoria era producto de la supremacía respecto de sus oponentes.

Construyó un discurso basado en valores muy propios, que a decir verdad se escuchaba bonito, creíble y hasta facilitaba el sumarse a sus causas sin el menor cuestionamiento. Logró de esta manera tener millones de seguidores que respaldaron su movimiento.

A raíz de casos como este, donde comenzaba a prevalecer la sospecha de que siempre ganaba el mismo;  las reglas fueron más estrictas, los jueces buscaron medidas y sanciones más severas para quienes las infringieran. Lo anterior desencadenó confrontaciones entre los competidores, las organizaciones que giran en torno a ellos, las empresas patrocinadoras, inclusive los medios de comunicación tomaron partido.

Por fin otro contendiente alcanzó la gloria, sin embargo, los gritos de inconformidad fueron inclusive más fuertes. Una vez más, cambios en las reglas…Bajo este nuevo escenario el PRI regresa a los Pinos y con ellos la historia se repite…por cierto Lance Armstrong fue despojado de todos sus títulos por tramposo, sus victorias fueron impugnadas imperando la razón y la verdad, ya decía yo que había ciertas similitudes.

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