Las antipatías violentas son siempre sospechosas y revelan una secreta
afinidad…William Hazlitt
Durante el segundo debate de los candidatos presidenciales
organizado por el IFE, el profe Quadri intentó moderar y llevar la voz
cantante. Sabedor de su posición en la tabla, no le restaba más que incomodar a
sus rivales y de alguna manera lo hizo, sin embargo, sus dotes de docente, que
solemos ser muy insistentes a la hora de preguntar y no nos quedamos conformes
hasta no escuchar alguna respuesta, lo traicionaron.
Se metió en temas que a todo candidato le resultan incómodos
y que las respuestas suelen dejar ondas heridas en el respetable. Las opiniones
sobre ciertos tópicos pueden en ocasiones ser tan cuestionadas que hasta la
amistad puede perderse.
La legalización de la unión matrimonial entre personas del
mismo sexo ha desatado cuestionamientos por parte de instituciones, grupos y
personas en lo individual. Un país tan diverso como el nuestro en sentido
político, religioso y cultural pone de manifiesto multiplicidad de opiniones y
puntos de vista sobre este y otros temas por demás espinosos.
En otras sociedades el tema está ampliamente superado, inclusive los homosexuales hayan o no
contraído nupcias, pueden adoptar hijos. Negar derechos a estas personas solo
por su preferencia sexual, pareciera no ser digno de una sociedad democrática,
que sustenta su ideal precisamente en el respeto a la diversidad y la tolerancia.
El hecho de ser heterosexual no implica mérito suficiente
para garantizar la crianza saludable de una criatura o el derecho a poder
adoptarlo, sin afirmar que en México se otorgue la adopción tomando en cuenta
solo ese factor. El hecho es, ¿hasta dónde puede la preferencia sexual influir
en el otorgamiento o reconocimiento de los derechos hacia una persona?
Muchas veces el hecho de tener un vínculo civil o
eclesiástico les proporciona a las familias derechos legales y sociales
suficientes para educar y formar a los peques, sin precisar si cuentan o no con
otros elementos a su alcance que garantice que está práctica sea verdaderamente
efectiva.
Quizá Ricki Martin, Miguel Bose o Lalo España puedan ser
excelentes papis chulos, inclusive hasta mejor que otros que sigue viviendo
presos de sus frustraciones y anhelos por deslizarse al bando contrario.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por tu comentario.