La
iglesia nos pide que al entrar en ella nos quitemos el sombrero, no la cabeza…Gilbert
Keith Chesterton
El miércoles de ceniza marca el inicio de la Cuaresma en el calendario
católico. Se celebra
cuarenta días antes del inicio de Semana Santa. Antiguamente
los judíos y otros pueblos acostumbraban cubrirse de ceniza cuando hacían
algún sacrificio como gesto de arrepentimiento profundo. La Biblia menciona
múltiples ocasiones y pueblos que utilizaban la ceniza en significado de duelo.
En los primeros siglos de la
Iglesia, las personas que querían recibir el Sacramento de la Reconciliación se
ponían ceniza en la cabeza y se presentaban ante la comunidad vestidos con un
"hábito penitencial". Esto representaba su voluntad de convertirse.
La ceniza no sólo debe recibirse en
la frente con la señal de la cruz, según la costumbre debe haber ayuno y
abstinencia. Por suerte no cayó este año en 14 de febrero, fecha en que las
muestras de afecto, amor y pasión se desbordan. Los moteles lucen abarrotados,
recibiendo gustosos a los enamorados sedientos de mostrar sus afectos.
La iglesia
católica ha recibido una noticia impactante e inesperada. El Papa se nos va. Sus
afecciones cardíacas lo han hecho dimitir al cargo. Me
hizo recordar aquella cinta dirigida por Rafael Baledón e interpretada por
Ignacio López Trazo, que trata sobre los sobornos y la ética y rectitud de un
secretario de estado que no se deja sobornar, motivo por el cual deja su cargo
alegando motivos de salud.
Sera el
marcapasos o el cansancio de Benedicto, lo cierto es que la Iglesia católica ha
transitado en los últimos años por escándalos de todo tipo. Desde la
divulgación de casos de pederastia en varias partes del mundo de los que la
iglesia se hizo de la vista gorda, hasta el robo de información confidencial por
parte de su secretario privado, que cimbró las estructuras de poder del
Vaticano.
Recibamos la
ceniza con la frente en alto y dispongamos a guardarnos y mantenernos distantes
de los placeres de la carne…solo por hoy.
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